La asociación Ziskakan nació en 1979 en el corazón de la isla Reunión, todavía bajo el yugo de una política neo-colonialista. Impulsada por Gilbert Pounia, Patrice Threuthard, Carpanin Marimoutou, Anny Grondin y numerosos jóvenes intelectuales apasionados: desde el primer momento, la asociación se propuso defender el respeto de la lengua “créole” (o kréol, lengua vernácula de la Reunión) y promover la cultura de la isla. Desde el principio, instrumentos tradicionales reunioneses pero también africanos e indios, enriquecieron sus arreglos.
Entre folk, séga (música tradicional de la Reunión) y maloya, entre poesía y compromiso, entre música eléctrica y acústica, el público encuentra con Ziskakan una respuesta a su búsqueda de identidad a la vez que un nivel de creación musical excepcional. Un estilo único que a Gilbert Pounia le agrada calificar de música indo-afro-sino-euro-malagasy (de Madagascar).
Muy rápidamente el grupo musical tomó una importancia capital en el seno de la asociación recorriendo la isla y organizando kabars marrons (conciertos gratuitos, íntimos y casi clandestinos) y otros happenings (espectáculos espontáneos y en parte improvisados) rurales.
Después de varias grabaciones, ahora míticas, Ziskakan evolucionó y no dejó de progresar en una sociedad en permanente cambio. La música del grupo se hizo más rica a lo largo de las composiciones y su apego a la calidad de la letra le permitió alcanzar un nivel de creación que empezó a interesarles a muchos profesionales de la música.
Las primeras giras del grupo por Francia le permitieron al público descubrir los ritmos de Isla Reunión. En 1993, el grupo firmó para la disquera Island/Polygram publicando el álbum “Kaskasnicola”, un detonador que propulsó la banda y le permitió beneficiarse de un notable arsenal de promoción.
Al disco le siguieron las giras, entre las cuales una memorable en Estados Unidos después de la cual Ziskakan se encontró clasificado en el Top Ten California y que le permitió a Gilbert Pounia encontrar a Chris Blackwell, jefe de Island, quien le propuso intensificar su colaboración.
El año siguiente, después de varias participaciones destacadas en diversos festivales de Europa, Ziskakan obtuvo el título de mejor grupo en los Kora Awards de África del Sur. En el ‘98 celebraron sus 20 años publicando una recopilación de sus tres primeros trabajos, hoy en día agotada y sólo posible de conseguir en mercados de coleccionismo. El éxito conseguido con aquellas reediciones, llevó al grupo a volver a realizar composiciones más cercanas al espíritu que motivaron el origen de la asociación y del propio grupo.
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